Bancuadra: créditos que mejoran la calidad de vida

En octubre del presente año, esta estrategia municipal que brinda préstamos de libre consumo a una tasa de interés muy baja a los ciudadanos fue institucionalizada como programa por el Concejo de Medellín, lo que permitirá su continuidad en administraciones futuras.



“Bancuadra llegó en el momento preciso”, recuerda Maryori Beltrán, quien encontró en esta estrategia de la Alcaldía de Medellín una salida a las dificultades económicas que ella y su madre Luz Elena afrontaban hace dos años.
Con vecinos y familiares del barrio Castilla, comuna 5, esta psicóloga de profesión y comerciante formó una red de confianza con la que accedió a préstamos de libre consumo para atender necesidades básicas como servicios públicos, transporte y salud, entre otros gastos.
Gracias a Bancuadra, Maryori no solo tiene la posibilidad de obtener microcréditos a una de las tasas más bajas del mercado (0.91 % mensual), sino que también recibe capacitaciones sobre el manejo del dinero, formación que le ha permitido ahorrar para cumplir metas como viajar a la costa con su familia o arreglar gradualmente su vivienda.
“Los profesionales de Bancuadra son personas muy lindas que además de brindarnos aprendizajes financieros nos han enseñado a compartir y a convivir, a ponernos en los zapatos del otro y a desarrollar una mentalidad que nos facilita invertir en nuestros sueños”, expresa esta mujer que cada ocho días asiste a las capacitaciones organizadas por el programa financiero.
Así funciona
Bancuadra es una estrategia diseñada para combatir los préstamos gota a gota o paga diarios, los cuales además de ser una fuente de financiación para grupos delincuenciales pueden llegar a convertirse en una bola de nieve para las personas que los toman, ya que los intereses cobrados son escandalosos.
Para acceder a los créditos de Bancuadra, los usuarios deben conformar redes de confianza con amigos o vecinos que tengan mínimo cinco personas. El monto de los préstamos van desde $200.000 a 2.5 salarios mínimos legales vigentes.
Los solicitantes deben tener entre 18 y 70 años y vivir en Medellín o en sus corregimientos. El pago de la deuda se puede realizar en un plazo de tres meses con cuotas semanales o quincenales.
Los préstamos se les otorgan a personas que pertenezcan a grupos de vecinos, familiares y amigos, lo que hace que el principio de la confianza predomine en esta iniciativa.
Desde finales de 2017 a octubre de 2019 se han constituido más de 2.900 de estas redes comunales, lo que ha beneficiado a más de 14 mil personas a quienes se les ha prestado en total $3.400 millones.
“Un aspecto muy importante que podemos identificar es que los usuarios del programa agradecen, más que los mismos créditos, la formación financiera que les brindamos y el sentirse incluidos en una sociedad”, indica Juan Camilo Niño, director técnico del Banco de los Pobres.
Un banco para la igualdad
Bancuadra es una iniciativa del Banco de los Pobres, programa social del Municipio que busca el mejoramiento de los índices de desarrollo humano y calidad de vida en la ciudad a través de la ampliación y fortalecimiento del tejido empresarial y el otorgamiento de alternativas de financiación a las personas menos favorecidas de la sociedad para el emprendimiento de actividades productivas.
Durante el cuatrienio, por medio del Banco de los Pobres, la actual Administración Municipal ha otorgado 119.000 créditos para impulsar proyectos de emprendimientos de ciudadanos de los estratos 1, 2 y 3.
De 2016 a 2019, el Banco de los Pobres ha invertido más de $100.000 millones en créditos para pequeños negocios. Entre 2012-2015, esta entidad destinó $53.000 millones.
Para mayor información de Bancuadra, visitar la sede del Banco de los Pobres, ubicada en el sótano de la Alcaldía de Medellín, en La Alpujarra, o comunicarse  en el teléfono 444 4144 opción 2.
Por Juan Sebastián Mora Eusse