La Secretaría de TIC y Competitividad, la Cámara de Comercio y Sharecollab se unieron para presentar en Manizales el modelo de economía colaborativa ‘Connecting the Dots’, una manera de transferir conocimientos mediante co-creación, colaboración, desarrollo de proyectos y conexión entre comunidades.
“La economía colaborativa es la disrupción del mercado, es todo lo que hacemos: comprar, vender, alquilar, prestar e intercambiar, todo ello redefinido por las tecnologías y las comunidades para inventar una nueva forma de consumir y producir”, explicó Gustavo Palacio, de Sharecollab.
La economía colaborativa es un llamado a aprovechar recursos subutilizados que todos poseemos, con el fin de ser más útiles en nuestro diario vivir promoviendo nuevos modelos de negocio como sistemas basados en producto, mercados de redistribución o estilos de vida colaborativos.
Sistemas basados en producto
Pagar por el beneficio de utilizar un producto sin la necesidad de adquirirlo, por ejemplo, las industrias tradicionales basadas en modelos de propiedad privada individual.
Mercados de redistribución
Redistribuir los bienes usados de donde ya no se necesitan hacia algún lugar o alguien que sí los requiere. El mejor ejemplo son los mercados de intercambio y de segunda mano.
Estilos de vida colaborativos
Compartir o intercambiar bienes materiales o intangibles entre comunidades, por ejemplo, intercambiar tiempo, espacio y habilidades entre personas con intereses comunes.