Artistas aún tenemos trabajo que hacer para sanar nuestro país, afirma la creadora de la obra ‘Paz Colombia’

La obra será entregada por el Presidente Juan Manuel Santos a sus majestades Harald V y Sonia de Noruega; Carlos Gustavo XVI y Silvia de Suecia, y al Papa Francisco, en el viaje con motivo de la entrega del Premio Nobel de Paz.
La artista plástica colombiana Ana González tituló así su trabajo que, con el símbolo de la paz y flores de la Amazonía y el Chocó, refleja la biodiversidad del país y su anhelo de paz.


Luego de más de 15 años de arduo trabajo, la artista plástica colombiana Ana González Rojas fue objeto de un importante encargo que marca el culmen de su carrera: crear los regalos que el Presidente Juan Manuel Santos entregará a los reyes de Suecia y Noruega, así como al Papa Francisco durante su visita a Europa.

La coyuntura es histórica. Durante el periplo europeo, el Presidente Santos recibirá el Premio Nobel de Paz y visitará al Pontífice en el Vaticano. Si a ello se suma a la reciente suscripción entre el Gobierno y las Farc del llamado Acuerdo del Teatro Colón, la ocasión se torna inmejorable. Un momento para que el arte colombiano brille con todo su esplendor.

González Rojas encarna el espíritu de paz que está plasmado en su trabajo. Ella llama la atención por su sencillez y hablar pausado. Sus ojos emiten un brillo resplandeciente cuando habla del honor que significa que su obra haya sido seleccionada por la esposa del Jefe del Estado colombiano, María Clemencia Rodríguez de Santos, para agasajar a tan ilustres anfitriones.

“Yo me siento muy agradecida con Presidencia, con la señora María Clemencia, con el Presidente. Siento que ellos han valorado el mensaje que los artistas estamos tratando de enviar y es ese mensaje de que tenemos que pasar la página, de que tenemos que ir más allá”, dice con emoción.

Según relata Ana, la esposa del Mandatario supo de su obra y decidió conocerla más a fondo para llevar su arte hasta el Viejo Continente.

“Ella (María Clemencia Rodríguez de Santos) le ha hecho seguimiento a la obra mía hace un tiempo ya (…). Me llamó y quiso conocer la obra más de cerca, y ahí fue cuando ella dijo: no pues esto puede ser una obra para mostrarle al mundo y a la gente que entienda un poco que Colombia, que somos un país de flora y fauna”, narra.

Y es que el trabajo de González Rojas refleja la riqueza de la biodiversidad colombiana y el anhelo de paz de los casi 50 millones de colombianos.

La obra bautizada ‘Paz Colombia’ se inspira en flores originarias de la Amazonía colombiana y el departamento de Chocó y hecha a mano en porcelana Limoges.

“También hay una abeja que se llama abeja euglossa, y tiene una relación perfecta y equilibrada entre abejas y flores hace como 20 millones de años. Entonces es como el equilibrio y la relación armónica que hace que subsistamos en el planeta entonces es todo un ejemplo de vida”, recalca.

“La inspiración para esta obra es la paz. Y pues es todo el proceso que estamos viviendo. Yo llevo trabajando varios años con desplazamiento en Colombia y con flora y fauna colombiana”, dice con orgullo.

“En este caso en particular, quería inspirarme en el tema de la paz, un poco también a través de la naturaleza, porque la naturaleza nos enseña que todo son ciclos de vida, que donde hay muerte después hay semilla y después hay vida, todo va sanando. La idea es mostrar eso a través del arte”, explica.

La artista colombiana, egresada de la facultad de arquitectura de la Universidad de Los Andes y especialista en Arte de la Escuela Nacional de Bellas Artes de París, Francia, ha vivido de cerca los rigores del conflicto.

Desde que culminó sus estudios en la capital francesa y regresó a Colombia en el año 2003, decidió trabajar con comunidades indígenas y desplazadas, asesorándolas en la creación de canastos y vajillas que luego vendían, para subsistir.

“Yo ayudaba a que se reubicarán acá. Yo ayudándoles escuchaba sus historias y las historias de los desplazados son impresionantes. Y la obra empezó a surgir fue de las historias que ellos contaban”, relata.

Cuando habla de su primera obra, su mirada se torna un poco nostálgica, mientras que su rostro emite una tímida sonrisa.

“Mi primera obra fue de los vestidos de domingo que llevan las niñas cuando salen desplazadas de sus casas. Ese vestido que llevan como de bautizo, de primera comunión, es de lo primero que llevan en su bolsa cuando salen desplazadas y lo llevan con mucho orgullo y amor”, indica.

Y añade que “es como un sentido de pertenencia del lugar de donde vienen”.

Ana cuenta que trabaja con comunidades de departamentos de Chocó, Caquetá, Amazonas, Tolima, Córdoba, regiones como la Costa y zonas azotadas por el conflicto como los Montes de María, varias de las cuales ya se ven beneficiadas con la terminación del conflicto con las Farc.

Tal vez por eso Ana, inspirada por un momento tan particular, hizo su obra ‘Paz Colombia’ con tanto amor y dedicación.

“Esta obra se llama ‘Paz Colombia’, porque es la paz que estamos viviendo ahora en Colombia, es lo que todos anhelamos y es un mensaje esperanzador, inspirado en la naturaleza”, afirma.

No obstante, advierte que aún queda un largo camino por recorrer en materia de construcción de paz y atribuye un papel preponderante a los artistas en esa consigna.

“Yo creo que el trabajo apenas comienza, entonces tenemos que generar nuevas ideas y nuevos ejemplos y soluciones de todas partes. Trabajo hay haya o no haya paz, estoy segura que tenemos trabajo todavía para poder sanar el país que tenemos”, puntualiza.

Una idea grabada en una obra que ya cruzó el Atlántico, que está destinada a ser un símbolo de paz y que constituye un ejemplo de reconciliación para un mundo convulsionado por conflictos.