Alcaldía de Medellín gradúa como bachilleres a 113 personas pertenecientes a población vulnerable

713 personas han concluido su proceso de formación con el Centro de Formación para la Paz y la Reconciliación -Cepar-.
El Cepar pertenece al proyecto Reintegración Sostenible para un Territorio en Paz de la Secretaría de Seguridad y Convivencia de la Alcaldía de Medellín.

El programa brinda educación para la paz, con un enfoque de convivencia e inclusión social.

La Alcaldía de Medellín, a través de la Secretaría de Seguridad y Convivencia, graduó como bachilleres académicos a 113 pertenecientes a población vulnerable por haber vivido situaciones como el conflicto armado, el desplazamiento forzado, el consumo de sustancias sicoactivas, la falta de oportunidades y la pobreza, entre otras.

Este proceso de formación se adelantó en el Centro de Formación para la Paz y la Reconciliación -Cepar- como parte del proyecto Reintegración Sostenible para un Territorio en Paz.

El Cepar dirige un  modelo educativo que se adapta a las  condiciones de aprendizaje de la población que atiende, a quienes les ofrece gratuidad, flexibilidad horaria al contar con siete jornadas académicas, matrículas permanentes, períodos de validación trimestral, estimulación cognitiva, asesoría sicológica y jurídica y durante las horas de clase y el cuidado de sus hijos menores de siete años. Las matrículas se reanudarán en enero de 2017.

Una de las bachilleres es Disneda González, de 25 años, quien cursó desde el grado octavo en este Centro de Formación e hizo parte del grupo de Inclusión Educativa. Llegó a Medellín hace 8 años de Puerto Valdivia, tras un lamentable accidente: caminando con su hija en brazos, fue víctima de una explosión de mina antipersona, lo que ocasionó la pérdida parcial de su brazo izquierdo y de una pierna, situación que limita su capacidad funcional. Agradece que su bebé sólo sufrió quemaduras.

Otro de los beneficiarios es Weider Arlex García Pavas, de 18 años, quien también se certificó como bachiller, ingresó al Cepar en restablecimiento de derechos para culminar su educación media, fue remitido por el Hogar La Libertad, de la Fundación Hogares Claret, de donde es egresado. Cuando tenía 9 años huyó de la casa donde vivía porquela señora que lo tenía a su cargo lo reprendía porque no toleraba su orientación sexual. Así mismo, describe García Pavas, “he superado con éxito procesos de consumo de sustancias, de explotación sexual comercial y de trabajo infantil”.