86% de tenderos en Colombia temen al impuesto a las bebidas azucaradas

Un estudio realizado por Fenaltiendas demostró que de implementarse el impuesto, los tenderos y las personas de bajos recursos serían los principales afectados.
Fenalco solicita al Gobierno no impulsar esta medida y a los congresistas no aprobarla.

Como preocupante califican la situación los tenderos del país, ante la posibilidad de que el Gobierno imponga un impuesto adicional a las gaseosas y demás refrescos que contengan azúcar como tés, jugos y polvos para disolver. De acuerdo con una encuesta realizada por Fenaltiendas, más del 86% de los tenderos de barrio en Colombia temen que esta medida afecte su negocio.

Las gaseosas ocupan el primer lugar en el ranking de productos que mayor margen dejan al canal tradicional. En consecuencia los tenderos estiman que sus ventas pueden caer hasta un 33% sobre el ingreso neto total, esto sin contar las ventas asociadas a las bebidas como productos de panadería, paquetes, pasabocas y otros.

Sergio Ignacio Soto Mejía, Director Ejecutivo de Fenalco Antioquia, explica que esta medida desestimula al pequeño comercio y sus esfuerzos por formalizar y crecer sus negocios, además de poner en peligro más de 12.000 empleos derivados de la industria de bebidas no alcohólicas.

"La medida es altamente regresiva y afecta directamente a los tenderos y personas con menores ingresos, porque son quienes más consumen estos productos. Afecta directamente el bolsillo del consumidor de los estratos 1, 2 y 3 y pone en riesgo los esfuerzos que la Federación ha hecho por formalizar a miles de tenderos en la región", añade el Dirigente Gremial.

La medida que ha sido implementada en otros países no ha obtenido el éxito esperado. Por ejemplo en Dinamarca, tras la pérdida de 5.000 empleos, se derogó el impuesto. En México afectó el consumo de gaseosas como consecuencia lógica del aumento en el costo final al consumidor y la ingesta calórica únicamente se redujo en 2,5 calorías día. El resultado inmediato fue el cierre de más de 33.000 tiendas de barrio.

Los cálculos del Ministerio indican que una medida de este tipo puede recaudar alrededor de 1.7 billones de pesos anualmente con una destinación departamental para financiar el sistema de salud. En ese sentido, la presión por parte de las autoridades departamentales se ha incrementado para que este impuesto sea aprobado.

Fenalco considera que este es un impuesto inconveniente y regresivo, por esta razón, respetuosamente solicita al Gobierno no impulsar esta medida y a los congresistas no aprobarla puesto que pondría en riesgo miles de familias que subsisten de las tiendas de barrio.