Durante su intervención en el marco de un encuentro del Ministerio Público en la capital antioqueña, el Defensor del Pueblo, Alfonso Cajiao Cabrera, llamó la atención de los servidores públicos y de la sociedad para que desde el rol de cada uno en el diario vivir, contribuyan a la consolidación de una paz establece y duradera y una cultura de derechos humanos en el territorio nacional.
El jefe del organismo de control advirtió un posible incremento de la protesta social en el post acuerdo y dijo que es tarea de la Defensoría del Pueblo y de las Personerías municipales en particular, asegurar el respeto por el derecho a la libre expresión de las inconformidades y los derechos de quienes son ajenos a esos movimientos de manifestación popular.
Cajiao Cabrera señaló que tras la firma de los acuerdos para el fin del conflicto entre el gobierno y las FARC,resulta indispensable que los ciudadanos se sintonicen con la necesidad de lograr la reconciliación, y precisó que para ello es primordial resolver las discrepancias a través del diálogo y con apego a la ley.
A propósito, el Defensor del Pueblo consideró importante acoger el nuevo Código de Policía como una herramienta encaminada a superar los inconvenientes de convivencia, principalmente en los centros urbanos, ello sin que todas las conductas deriven en la privación de la libertad como castigo.
En su intervención, el Defensor Cajiao Cabrera agregó que el arraigo de una cultura de derechos humanos en Colombia debe tener un enfoque especial en favor de las víctimas del conflicto y requiere una articulación decidida en las regiones, donde el Ministerio Público deberá desempeñar las mismas funciones con mayores retos y menores recursos a su disposición.